jueves, 13 de mayo de 2010

PROGRAMA FORO SOCIAL RIVAS

Izquierda Unida rechaza la propuesta de trasladar la central eléctrica al polígono industrial de Güímar


Las Asambleas Locales de Izquierda Unida en los municipios de Candelaria, Arafo y Güímar se posiciona en contra del traslado de la central del UNELCO al polígono industrial del valle de Güímar, y apoya la posición de los vecinos de la playa de la Viuda, del casco de Candelaria, de Araya, de Cuevecitas, Malpaís y del resto de habitantes del Valle. Además, propone que se tenga la valentía democrática de preguntar a los habitantes del Valle su opinión en referéndum.

Llama la atención el desinterés y la falta de manifestaciones del Gobierno municipal de Arafo que pasaría a ser el municipio más afectado por el cambio de ubicación.

La mayor parte del polígono industrial está situado en Arafo, sin embargo, ni en la Memoria de información, ni en el informe de sostenibilidad del avance PGO se hace referencia a la influencia de un Polígono Industrial de la envergadura del de Güímar en la contaminación atmosférica y costera del municipio y del valle.

No se aporta un censo de las industrias, ni existe un diagnóstico de la tipología de industria, sus materias primas, procesos de transformación que utilizan, de los residuos que generan, etc.

Ninguno de los municipios del Valle ha abordado las repercusiones que tendría su crecimiento ni se enfoca el tipo de actividad industrial de cara al futuro, ni se plantean medidas correctoras sobre los agentes contaminantes ni sobre el impacto visual en el paisaje.

El Grupo de Gobierno Municipal de Candelaria ha pasado de exigir el desmantelamiento y de apoyar las protestas, por el ruido y la contaminación, que los vecinos de Candelaria llevan sufriendo más de cuatro décadas, a la negociación para mantenerla dentro del mismo municipio con lo que se seguiría perjudicando y dañando la salud de las personas que viven en Candelaria y en el conjunto del Valle sin contar con la opinión de estos.

La razón de este cambio habría que buscarla en lo que siempre el Grupo de Gobierno de Candelaria ha pretendido: disponer del suelo para el desarrollo urbanístico y de las plusvalías que puede generar si pasa a manos privadas.

Los vecinos, la salud de las personas de nuestros municipios no es importante para los gobiernos municipales, ni para Unelco-Endesa como viene demostrándose durante años en otras muchas cuestiones y en esta en particular.

Pronto vendrá esta entidad y sus correligionarios a prometer muchas inversiones, subvenciones y estudios sobre su inocuidad como hicieron con el tendido eléctrico sobre Vilaflor.

Sin embrago no debemos olvidar que el Valle de Güímar es el menos indicado para albergar una Central térmica como ya indicó el estudio que hizo la Universidad de La Laguna sobre la concentración de ozono troposférico en nuestro Valle.

El ozono troposférico puede llegar a ser un problema cuando se provoca un aumento de su concentración por medios artificiales, como es el caso de la contaminación generada por una central eléctrica. Al aumentar su concentración, el ozono se convierte en un contaminante que afecta a la salud de las personas. Pero, el ozono no sólo es perjudicial para los ciudadanos, también lo es para el resto de los seres vivos. Por ejemplo, es altamente tóxico para las plantas. Afecta a las paredes celulares, disminuye la actividad fotosintética y perjudica su crecimiento, provocando una disminución de la vegetación natural y de la producción agrícola.

La orografía del terreno y la entrada de vientos alisios haría que toda la contaminación generada por la central eléctrica se concentre en una zona de medianías muy poblada y cerrada por las laderas del valle, potenciándose los efectos negativos.

Tanto en este caso, como en otros que afectan a la sostenibilidad de la isla, hace falta mayor debate y la búsqueda de alternativas energéticas menos agresivas, junto al replanteamiento del modelo desarrollo que tenemos y al esfuerzo del conjunto de la sociedad para lograr una mayor eficiencia energética.